¿Cómo implementar cambios en tu vida en pro del medio ambiente?
Lo primero que debes tener presente es que cualquier cambio sostenible que implementes en tu estilo de vida, por pequeño que sea, estás contribuyendo con el medio ambiente. Es imposible ser 100% sostenible, pero pasa a paso vamos contribuyendo a un planeta más verde.
¿Cómo empezar?
Empieza desde tu entorno más cercano, tu casa. Revisa la cantidad de residuos que generas a la semana y trata de disminuirlos. Para ello puedes clasificar tus residuos según sean aprovechables (todo material reciclable y reutilizable), no aprovechables (residuos de barrido, sanitarios, entre otros), y residuos orgánicos (cáscaras de frutas, vegetales, semillas).
Para reducir los residuos no aprovechables, puedes emplear envases reutilizables como envases de vidrio, bolsas de tela, cubiertos portables, servilletas de tela, jabones y shampoo en barra, pañales de tela, o la copa menstrual para reducir el uso de toallas higiénicas. Éstas son sólo algunas ideas, pero con seguridad encontrarás muchas otras alternativas en el mercado local.
¿Y el agua?
El agua es nuestro recurso más preciado y debemos cuidarla. Reduce el tiempo en la ducha: puedes colocar una canción de menos de 3 minutos y apenas se acabe, sabes que es tiempo de salir. Usa la carga completa de la lavadora, recolecta el agua lluvia para lavar baños y pisos, riega tus plantas en la noche para que el sol no evapore el agua, ¿qué otras ideas tienes?
¿Qué estás comiendo?
Luego de echarle un vistazo a tu casa, revisa tu entorno más íntimo, tu cuerpo. Analiza qué tipo de alimentación llevas, qué tipo de productos adquieres. Procura reducir la comida con demasiados empaques o empaques innecesarios, así como el consumo de carne. Esto no significa que debas ser vegetariano/a, pero puedes incluir en tu dieta varios días a la semana sin consumo de carne.
¿Realmente lo necesitas?
No hagas compras por impulso, aprende a ser consciente de lo que compras. Pregúntate siempre antes de comprar algo que no sea de primera necesidad, si realmente lo necesitas. Si este es el caso, intenta hacer tu compra en negocios locales, que estén comprometidos con el medio ambiente.
Lo que no usas, dónalo o haz trueque
La sostenibilidad como estilo de vida va de la mano con el minimalismo. Intenta tener sólo lo necesario, por ejemplo, revisa tu clóset constantemente y separa la ropa que ya no estés usando, puedes donarla, venderla o hacer un trueque por algo que sí estés necesitando.
Lo mismo puedes hacer con libros, muebles, juguetes, utensilios de cocina, etc., todos los elementos que tengas y estén en buen estado o sean reparables.
Éstos son sólo algunos consejos de cambios sostenibles en tu estilo de vida, lo importante es que inicies desde ya. Cualquier cambio que adaptes a tu vida será una gran ganancia para el medio ambiente. Infórmate, implementa y contagia a más personas.